#YoMeQuedoEnCasa
Aprovechando el tiempo en casa, hoy tenemos una entrada invitada. Nuestra amiga María Díaz nos cuenta con detalle su experiencia en Nepal:
Podríamos contarte mil cosas de
Nepal pero sólo te diremos que si te estás planteando viajar a este país, hazlo,
no lo dudes. Nepal es uno de esos países que enganchan, por su gente, su
naturaleza y sus costumbres. Es uno de esos sitios que te transforman, que te
hacen replantearte tu forma de vivir y tus principios. Para nosotros, es uno de
esos sitios que “te recolocan la vida” y esos sitios, hay que vivirlos.
Vistas del Annapurna desde el tramo Ghorepani-Ghandruk |
Te vamos a recomendar que
disfrutes del viaje, que improvises y que te dejes llevar por la calma del
entorno. Te recomendamos que no lleves fechas completamente fijadas ni un plan
de viaje muy ajustado (los imprevistos son comunes allí y te pueden suponer
alguna noche que otra de retraso). Para ello, vamos a intentar darte toda la
información que consideramos importante para que disfrutes al 100% de esta
experiencia vital. ¡Allá vamos!
PREPARANDO EL VIAJE:
Visa Nepalí: Puedes
solicitar la visa antes de tu viaje, sin embargo, a nosotros no nos dió tiempo.
La mejor opción, y la más rápida, es solicitarla una vez que llegas al país. ¡Si,
has leído bien, te la hacen en el mismo aeropuerto! Cuando bajas del avión y
entras en el pequeño aeropuerto de Katmandú, accedes primero en una zona de
gestión de visas. Todo el procedimiento, aunque algo caótico, está bastante
bien indicado. Primero debes rellenar un papel con tus datos y hacer una
solicitud telemática en unas máquinas instaladas en esa misma sala. Finalmente,
sólo tienes que pagar y recoger tu visa. Ten paciencia, el proceso se lleva un
par de horas dada la gran cantidad de pasajeros
Vacunación: Si vas a
viajar a Nepal, necesitas vacunarte obligatoriamente de la Fiebre Amarilla (si
se procede de un país endémico). Además, se recomiendan las vacunas: tétanos-difteria/tétanos-difteria-tos
ferina, triple vírica, hepatitis A y fiebre tifoidea. A nosotros además, en el
centro del viajero de Madrid, nos recetaron antibiótico en caso de diarrea.
Material: ¡Equipaje
ligero! Especialmente si viajas en época seca. Necesitarás todo lo que
necesitas habitualmente en tus salidas de montaña. Además, algunas cosas que
nos parece importante reseñar serían:
- Bota de trekking dado que los caminos son pedregosos.
- Membrana impermeable, incluso si vas en la temporada seca, es posible que te llueva algún día dado que el tiempo es muy cambiante.
- Frontales
- Pastillas potabilizadoras de agua. Nepal tiene un gran problema con el reciclaje de las botellas de agua, así que cuanto menos contribuyamos al problema, mejor.
- Es importante llevar un gel desinfectante de manos y usarlo antes de las comidas.
- Respecto a la ropa de abrigo, depende en la época en la que viajéis, pero recuerda que Poon Hill es un pico muy expuesto de forma que siempre suele hacer frío en la cima.
Dificultad de la ruta y
preparación física: Las guías apuntan a la dificultad moderada del trekking
de Poon Hill dado su desnivel y altura. El desnivel positivo de nuestra ruta
fue de 1.200 m positivos y 2.185m negativos. Cabe destacar que el desnivel
acumulado es sin duda muchísimo mayor. La mayor exigencia de la ruta viene dada
principalmente por la cantidad de escaleras de los caminos, que hacen dura la
subida, pero sin duda también la bajada. La recomendación es prepararse
físicamente para un estado de forma medio y conocer con anterioridad, si fuese
posible, la respuesta de cada uno a la altura.
Meteorología: El mejor
momento para viajar a Nepal es sin duda entre octubre y diciembre, durante la
época seca pero no demasiado fría. El segundo mejor momento es entre marzo y mayo,
algo más lluvioso pero bastante cálido. Si algo debes evitar es el verano, o
como allí lo llaman, la estación del monzón. A parte de lluvia y nubes, vas a
ver poco más.
Seguro de viaje: ¡IMPORTANTÍSIMO!
Como en cualquier viaje de este tipo, ten en cuenta que un simple constipado
puede hacer que necesites una evacuación que, en la mayoría de los casos, será
en helicóptero y, por tanto, ¡muy cara! Si bien es cierto que no necesitamos
echar mano del seguro, viajamos muy tranquilos contratando Intermundial
Total Sports. Están muy familiarizados con este tipo de viajes y, según las
referencias, responden muy bien ante cualquier adversidad.
Moneda: En Nepal usan la
Rupia Nepalí. Nosotros cambiamos moneda antes de ir, pero ojo, allí las cosas
no son demasiado caras y muchas las llevas pre-pagadas. ¡No te vuelvas locos
cambiando rupias! En nuestro caso, el gasto más grande fue el guía (incluyendo
alojamientos y comida durante el trekking) que lo pagamos en dólares
americanos.
DESPLAZAMIENTOS
INTERNACIONALES Y NACIONALES EN NEPAL
Vuelos Internacionales: No
existen vuelos directos desde Madrid a Katmandú (como por otra parte era de
esperar). En nuestro caso volamos a Katmandú haciendo escala en Dubái (Qatar
Airlines) y volvimos a Madrid haciendo escala en Doha (Emirates). Todos los
vuelos con ambas compañías fueron una experiencia totalmente recomendable.
Merece la pena reseñar que, en
nuestro caso, el primer vuelo (Madrid-Dubái) llegaba a destino a las 23.20 de
la noche y salíamos hacia Katmandú a primera hora del día siguiente. Optamos
por reservar una habitación en el Hotel Internacional del Aeropuerto de Dubái. No
es la opción más económica (188€ hab doble/noche), sin embargo, nos ahorramos
toda la gestión del visado para entrar en el país. Si vais con más tiempo, quizás
merece la pena entrar en Dubái y apreciar el contraste cultural con lo que más
tarde encontraréis en Nepal.
Desplazamientos a Pokhara
(ciudad más grande cerca del Parque de conservación del Annapurna y desde donde
salen las expediciones): Existen básicamente dos formas de llegar a
Pokhara, en autobús o en avión. Nosotros optamos por probar ambas experiencias
de forma que volamos desde Katmandú a Pokhara y volvimos en autobús a Katmandú.
Salvo que tengas especial interés en perder 10h de tu viaje en recorrer 200km
por carretera, merece la pena coger un avión. Los paisajes son bonitos, pero
ver el Annapurna y el Dhaulagiri desde el cielo no tiene precio.
Nosotros volamos con Simrik
Airlines pero, tras el error, recomendamos mucho volar con Yeti Airlines. Los
nacionales vuelan con Yeti Airlines de forma que hay muchos más vuelos y los
aviones son más grandes y nuevos (dentro de lo esperable en Nepal).
Avioneta de Katmandú a Pokhara, ¡toda una aventura! |
Transporte en Katmandú: Es
habitual que los hoteles de Katmandú tengan furgonetas propias esperando en el
aeropuerto para llevaros al hotel. Suelen ser compartidas con otros hoteles y ya
incluidas en el precio del hotel. ¡Ojo! Echa un vistazo al apartado de
timos.
En general en Katmandú te puedes
mover fácilmente caminando, así que es posible que no necesites transporte
salvo para ir al Aeropuerto o terminales de autobús para viajar a Pokhara.
Calles con encanto en Katmandú |
El tráfico en Katmandú es
caótico, hasta el punto de que quizás te lleve un rato intuir que conducen por
la izquierda! Es por eso que un trayecto corto se puede alargar mucho en el
tiempo y es importante que acuerdes el precio del taxi antes del viaje. Para
que te hagas una idea, un precio razonable que pagamos nosotros fueron 5$ por
unos 6 km de recorrido desde el hotel hasta el aeropuerto.
ALGUNAS RECOMENDACIONES:
Turismo por Katmandú: De
entre todos los consejos que te podemos dar sobre el turismo en Katmandú,
quizás el más llamativo sea que llevéis mascarilla. La contaminación allí es
altísima, hasta el punto de que en ocasiones cuesta respirar. ¡Echa también un
vistazo al apartado de timos!
Plaza Durbar, en el casco antiguo de Katmandú |
Hoteles fuera de Ruta:
-
Eco Hotel en el barrio de Thamel (Katmandú):
30€ hab doble/noche. Sin ser nada especial, la localización en pleno barrio
del Thamel es muy recomendable. Desde aquí podrás ir andando prácticamente a
cualquier sitio turístico de Kathmandú.
-
Peacock Guest House (Bhaktapur): 50€ hab doble/noche. Desde
luego está lejos de ser el más barato, pero sin duda merece mucho la pena. Es
un edificio de 700 años de antigüedad protegido por la UNESCO y localizado en
una de las plazas más antiguas y auténticas de Bhaktapur.
-
Hotel Marigold (Pokhara): ¡¡¡TOTALMENTE DESACONSEJADO!!!
especialmente por la falta de higiene. ¡Creemos que cualquier otro hotel de
Pokhara hubiese estado mejor!
Guías y porteadores: Quizás
algunas de las primeras cosas que te planteas cuando decides ir de trekking a
Nepal es: ¿podré ir por mi cuenta? ¿Necesitaré un guía? ¿Y porteadores?
Para nosotros la respuesta es
clara, puedes ir por tu cuenta, pero contratar un guía te facilita enormemente
la vida y además colaboras a la economía del país. Eso si, contrátalos sin agencias
intermediadoras que les explotan pagándoles una miseria por sus servicios.
Nuestro guía se llama Zuk y podéis encontrarle en Facebook tecleando Tamang
Suman. Sólo os podemos decir que es una persona increíble. A parte de conocer
enormemente el terreno, sabe mucho de flora, fauna, nombres de picos, rutas,
budismo, costumbres, etc, y que, si mostráis interés, no dudará en compartir
con vosotros. Él se ocupó de absolutamente todo incluyendo:
- TIMS: Trekker´s Information Management System, o lo que es lo mismo, la tarjeta de acceso al parque de los Annapurnas.
- Transporte en Jeep desde el aeropuerto de Pokhara hasta Ulleri, pueblo de inicio de la ruta.
- Comida y alojamiento, todo incluido en el precio del trekking a excepción de las bebidas alcohólicas.
Nosotros pagamos a Zuk 700€ (eso
sí, antes de salir para el Parque de conservación del Annapurna, ya que él va
pagando en el momento los servicios que contrata) por dos personas y 3 noches.
En nuestro caso no contratamos porteadores. Si contratáis porteadores, os
recomendamos lo mismo que antes, contactar directamente con ellos. Si decidís
contratarlos, Zuk os puede recomendar algunos.
Restaurantes: Estas
recomendaciones las encontraréis en cualquier guía, pero no queremos dejar de
recomendaros:
- Thamel House, situado en el barrio del Thamel en Kathmandú. La comida es muy buena y el sitio muy autentico y agradable.
- Hotel Peacock Guest House en Bhaktapur. De nuevo la comida muy buena y el entorno completamente auténtico.
¡¡Cuidado timos!!: Como en
cualquier otro sitio, se te nota que eres turista y eso te convierte en blanco
fácil. Te podemos contar un par de ellos para evitar que te pasen:
- Propina al conductor que os lleve del aeropuerto al hotel de Katmandú: ¿Hay que darle propina? Si quieres sí. ¿Hay que darle 10$? ¡Desde luego que no! Una propina razonable es 1$ aunque él te pida más.
- Transeúntes convertidos a guías turísticos improvisados en Katmandú: Se acercarán para ver si os pueden ayudar y os pasearán “gratuitamente” por Katmandú como acto budista. Después os llevarán a un edificio donde se venden cuadros, en teoría pintados por los niños del colegio, y os intentarán vender alguno. Luego os llevarán a una tienda para ayudarles a comprar comida. Digamos que como guías turísticos no están mal, pero te recomendamos que no te dejes llevar por la solidaridad, ya que los precios que te ofrecen ¡son totalmente desorbitados!
- Compras de ropa de montaña: Hay muchas copias de marcas caras de ropa de montaña, especialmente North Face. Sabréis exactamente si es una copia por el precio irrisorio que tienen.
LA AVENTURA DEL HIMALAYA:
TREKKING DE POON HILL
Nuestra ruta técnicamente comenzó
en el aeropuerto de Pohkara donde nos recogió Zuk, nuestro guía y nos llevó al
Hotel Marigold para dejar aquel equipaje que no necesitásemos llevar a la
montaña. Una vez recolocado el equipaje, salimos en Jeep hacia el Parque de conservación
del Annapurna. El trayecto dura unas 3h tras las que llegamos a Ulleri (2.010m).
Si consultas otras guías, verás que la ruta comienza un día antes haciendo el
tramo Nayapul-Ulleri a pie. En nuestro caso sólo teníamos tres días para hacer
la ruta y optamos por saltarnos ese tramo. Es importante tener en cuenta el mal
de altura, por ello no empezamos la ruta aún más arriba.
Día 1 Ulleri-Ghorepani: Amanece
en Ulleri y con él vemos, desde la cama y justo delante de nosotros, el
Annapurna sur (7.219 m) y el Hiunchuli (6.441m)
Vistas del Annapurna Sur desde la terraza del albergue |
La
bienvenida no puede ser más espectacular. Tras el desayuno en la terraza del albergue
con esas vistas espectaculares, nos ponemos en marcha.
Comenzamos a caminar y pronto nos
damos cuenta de que la mayoría de caminos en el parque son escaleras, de forma
que cansan pero también coges altura con mucha rapidez. Este hecho hace que la
duración de la ruta varíe mucho según tu estado de forma. Se calculan unas 4h
para la etapa de hoy y se la considera una de las más duras. Sinceramente, ni
lo uno ni lo otro, y tampoco consideramos estar en un estado de forma
excepcional ni mucho menos!
Con unas vistas espectaculares de
bosque verde y rododendros, llegamos en unos 30 minutos a Banthanti (2.200m).
Desde allí vemos el Machapuchare (6.997 m), que, aunque poco conocido, es un pico precioso que recuerda, salvando las distancias, al Ama Dablam. Se trata de una montaña sagrada y, como tal, nunca nadie la ha escalado dándole un halo todavía más atractivo.
Vistas del pico Machapuchare |
Seguimos caminando y llegamos a
Mangethanti (2.600 m) donde paramos a comer. Aquí hay muchos muchos turistas y
empiezas a darte cuenta de que es verdad aquello que cuentan de que muchos van
allí a ponerse en forma. Aunque esta ruta no es muy exigente si estáis
acostumbrados a la montaña, puede hacerse complicada si no habéis entrenado
mínimamente con anterioridad.
En menos de 3h llegamos a
Ghorepani (2.874m). Nuestro albergue (Hotel Peace and excellent view) está en
lo alto del pueblo y es totalmente recomendable. Desde su terraza se puede ver
el Dhaulagiri y los Annapurnas, es como estar en una película rodeado de
gigantes.
Si vais con guía, veréis que
ellos no suelen sentarse con los clientes a cenar. En nuestro caso queríamos
saber más de Zuk y conseguimos que se sentase con nosotros. Merece la pena
hacer una inmersión cultural a la vez que ves montañas espectaculares.
Día 2 Ghorepani-Poon
Hill-Ghandruk: Salimos del hotel a las 4:50 am para iniciar la subida a Poon
Hill (3.210m) de noche y ver amanecer desde arriba. Esta ruta nocturna de
escaleras es quizás lo menos bonito del viaje ya que quizás fuésemos unas 200
personas subiendo a la vez. Sinceramente, parece una procesión, lo cual le
resta mucho interés. Además, confirmamos que hay mucha gente que no está
preparada para subir allí y nos encontremos con bastante gente llorando de
agotamiento e hiperventilando en el camino.
Una vez arriba, el sol empieza a
asomar por el Annapurna y empieza uno de los espectáculos más bonitos que jamás
hemos visto. Estás rodeado por los Annapurnas, todos ellos, el Hiunchuli
(6.441m), Nilgiri (7.061m) y, al fondo, el Dhaulagiri (8.172m). La sensación
entre esos gigantes es indescriptible y no hay foto que represente la enormidad
de esas montañas. El viaje ya ha merecido la pena y la montaña, como siempre,
premia el esfuerzo realizado.
Cima de Poon Hill |
Empezamos a bajar, paramos a
desayunar en Ghorepani y seguimos nuestro descenso. Paramos brevemente en
Deurali (3103) y continuamos por una ruta encañonada llena de cascadas y bosque
verde frondoso hasta Bathanti (2.520m).
Rododendros en flor |
Allí nos tomamos un té y continuamos nuestro camino hasta Tadapani (2.610m)
donde paramos a comer. Nuevamente la ruta marcada era de casi 7h pero volvimos
a hacerla en apenas 5h. Sea lo que sea lo que tardéis, disfrutad del camino
porque merece la pena.
Después de comer continuamos la
bajada y, ahora sí, casi 7h totales de ruta después, llegamos a Ghandruk
(1.939m).
Panorámica de Ghandruk y su distribución en terrazas |
Es con diferencia el pueblo más grande de todos los mencionados hasta el
momento pero, para mi, el más bonito. Todo el pueblo se encuentra en las
terrazas de la ladera opuesta al Annapurna Sur de forma que las vistas son
espectaculares. Sólo se oían las risas de los niños en el valle mientras que de
fondo se veía todo el Annapurna Sur, fue realmente hipnótico. Puedes pasear por
Ghandruk e incluso conocer las pequeñas instalaciones del centro de
conservación del parque o su templo budista.
Día 3 Ghandruk-Pokhara: Lo
recuerdo como el despertar más bonito que he vivido jamás. Un té nepalí con
leche en la terraza del hotel mientras iba saliendo el sol para enseñarnos la
inmensidad del Annapurna.
Annapurna Sur desde Ghandruk |
Con las pilas cargadas comenzamos
la bajada. Los Jeeps están de huelga así que tenemos que bajar andando hasta la
entrada del parque y recortar dos horas de ruta para que nos pueda recoger un
taxi y llevarnos a Pokhara. Sin duda la compañía de Zuk fue increíble todo el
viaje, pero este día concreto además fue indispensable para encontrar
soluciones y no tener que perder una noche. Llegamos a Birethanti (1.025m),
entrada al Parque del Annapurna, donde nos esperaba el taxi para volver a
Pokhara. Aquí terminó nuestra aventura en la montaña, sin duda una de las
experiencias más enriquecedoras de nuestras vidas a todos los niveles posibles.
Ya de vuelta en Pokhara podéis
aprovechar para visitar el Museo Internacional de la Montaña, que merece
bastante la pena, o ir de compras.
Nuestra última parada fué
Bhaktapur, una
ciudad a 13km de Katmandú que merece la pena conocer.
Plaza Durbar en el casco antiguo de Bhaktapur |
Es una ciudad con un
centro histórico muy antiguo, la verdadera esencia de Nepal y sus templos. Sin
lugar a dudas, os recomendamos pasar allí al menos una noche y, si puede ser en
el Peacock Guest House, mejor que mejor. Un sitio espectacular para poner el
punto y final a un viaje inolvidable que recomendamos hacer a todo amante de la
montaña con ganas de vivir una experiencia de las que dejan una profunda
huella.
Autora: María Díaz
¡Y hasta aquí la entrada de hoy!
Y como siempre, ¡nos vemos en el monte, pero dentro de unas semanas!
#YOMEQUEDOENCASA
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